jueves, 10 de septiembre de 2009

un refugio

a veces me gustaría que pudiésemos ser un poco más fuertes, que no tuviésemos que esquivarnos todo el tiempo para evitar más conflictos
quisiera que estas paredes volvieran a ser un lugar seguro para estar contentos, pero ya no quedan ganas de estar aquí,
ni de tener que cruzar miradas, gestos, vocales ni consonantes
por todo lo que eso implica
por los minutos terribles que se fotocopian sin parar
las palabras que no existen
las formas que se pierden
los vacíos que se hacen cada vez más profundos
y la distancia, simple y asquerosa distancia.
los brazos se me caen lentamente y ya no me preocupa, tanto

2 comentarios:

Anónimo dijo...

Abrazuuuuu!
:**

Live For Words dijo...

Lamento la situación tan triste o desagradable, pero creaste unas frases buenísimas. Aquello de la fotocopia me mató

(sí, hoy es día de estructuras, no de contenidos... sorry :B)

Saludos, hace rato no te veo, Java.