miércoles, 6 de mayo de 2009

amable y divertido

No escribí nada acá en todo el verano. Me quejé por eso, y creo que finalmente todo se relaciona con que en esos días todo es más buena onda que ahora. Me gusta el otoño, pero siempre trae problemas o cosas medias raras, conversaciones pendientes, palabras atascadas que se liberan por acá y hojas secas tiradas tristes por el suelo y que no me agrada pisar, en realidad. No está todo tan mal en todo caso, pero bien-bien tampoco. No se puede tener todo en la vida, creo yo. Así que me conformaré con eso y con tratar de no ser egoísta. Y no, no quiero relacionar las estaciones del año con la vida, porque nada que ver. Y loco, me carga que mi vieja me mande a acostar cada cinco minutos. Es demasiado triste, como la canción.

2 comentarios:

Unknown dijo...

a mí también me pasa que cuando anda todo buena onda dejo de lado la escritura, pero siempre hay algo anecdótico o por el estilo que nos trae de vuelta.

sí! café cuando quieras :)

Loncha dijo...

No sé, igual es la rica la sensación de relajo que te queda después de escribir todo lo malo cuando estás enojada o los problemas te superan. Como que sirve de terapia, por lo menos para mi :)

besitos :*